El término "perla" no se sabe con toda certeza de donde viene, pero tal vez derive de "sphaerula" que significa esférica en latín. Las perlas esféricas o redondas son las más valiosas, claro está si escogemos unas que sean brillantes, con una piel lisa sin manchas y sin heridas. Cuanto más perfecta sea la perla más la apreciamos, y su tamaño? sí! en este caso el tamaño sí importa! cuanto más grande mayor será su precio y sabemos que el tamaño habitual de las perlas oscila entre el de la cabeza de un alfiler y el huevo de una paloma.
Escogimos estas perlas esféricas de belleza indiscutible!
por su perfección no necesitan nada más!! con ellas hicimos estos pendientes
Además, hay que decir que a la dificultad de tener una perla tan magnífica se suma la de encontrar dos! con las que poder hacer pendientes, lo que las hace todavía más valiosas. Por tanto, hay que cuidarlas!!
Las perlas son sensibles a cambios de temperatura y ácidos, por lo que intenta evitar su contacto con perfumes, lacas, cosméticos, ... para así conservar su belleza intacta ¡¡perlas para siempre!!
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